Ezequiel - Discipulado 8, Una sola nación.
EZEQUIEL 37:15-28
Este mensaje de Dios para su pueblo comienza, como los demás, en este libro, con la frase: "Vino a mi palabra de el Señor (v.15). Sin embargo, desde el principio hay una cambio en la forma que el profeta debía comunicarlo. Ezequiel debía actuar el mensaje. Tenía que tomar un palo y escribir el nombre de Judá, las tribus divididas que habitaban en el sur; y luego tomar otro palo escribiendo el nombre de José, el resto de las tribus que habitaban el norte (v.16). Dios le pide al profeta que en un acto simbólico junte ambos palos para que sean uno en su mano (v.17). Esto haría que la gente pregunte por el significado de este simbolismo y recién ahí Ezequiel debía comunicar verbalmente el mensaje.
Qué era lo que el profeta debía decir? Dios tomará a sus hijos de todas las naciones donde fueron dispersados y los traerá a su tierra. No serán ya dos naciones, sino una. Serán limpiados de sus contaminaciones, y el Mesías gobernará sobre ellos (v.21-24). Cuando esto suceda sabrán las naciones que el Señor eligió manifestarse a través de su pueblo, Israel (v.28). Este es un mensaje de esperanza para Israel.
Estás siendo obediente en comunicar el evangelio a quienes no tienen esperanza? Cómo puedes reflejar a Cristo hoy?
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