Discipulado 22, EL SERVICIO FIEL. Filipenses 2:17-23
Hoy la palabra de Dios en Filipenses 2:17-23 nos muestra cómo Pablo habla de sí mismo como una libación, una ofrenda que se derrama, que se entrega voluntaria y totalmente sobre el sacrificio. Así era su servicio fiel a los filipenses (v.17). Durante su minsiterio se exponía a grandes peligros, sufrió todo tipo de situaciones al llevar el evangelio a los gentiles. Pablo estaba dispuesto a morir con gozo por el ministerio que Dios mismo le había entregado (1:20-21).
¡Qué corazón y qué fe la de este hombre! Acababa de hablar de su posible muerte (v.17) pero al mismo tiempo tenía la esperanza de ser liberado para poder visitarlos otra vez. De cualquier manera esperó, en la voluntad del Señor, hasta enviarles a Timoteo (v.19), para que él también estuviese de buen ánimo al saber cómo se encontraban.
"Pues a nadie más tengo del mismo sentir mío, a ningún otro tengo tan unido a mi" (v.20). Timoteo era un ejemplo de humildad, al igual que Pablo, en buscar el progreso del evangelio sirviendo a Cristo y por consiguiente, a sus hermanos (v.21-22).
¿Estás dispuesto, al igual que Pablo, a entregar tu vida para que Dios la utilice como disponga? ¿Cómo muestras interés en las necesidades de tus hermanos en Cristo? ¿Es genuino ese interés? ¿Cuál es tu servicio para Dios? ¿Buscas sólo lo tuyo o lo que haces es de Crsito Jesús?
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